Algunas te han llegado a preguntar el por qué no progresas o por qué no te va bien en el trabajo, avanzar se te vuelve un conflicto o principalmente ¿Por qué no te arriesgas con una buena idea que tuviste un tú cabeza?, en este post te vamos a mostrar la razón por la que te encuentras estancado, vamos a tratar sobre la aversión a la perdida que produce tú mente.
Experimento de la aversión a la pérdida
Para entender de forma estable qué es la Aversión a la perdida. Vamos a un claro experimento hecho como tipo de ejemplo: En este, un grupo de investigadores hicieron un estudio en monos. Consistía en producir el dinero en su comunidad, el primer obstáculo se refleja en enseñarle a los primates que las fichas no eran un objeto, para lograrlo cada vez que le daban una podían canjearlas por golosinas.
De esta manera aprendieron que podían comprar comida con las fichas a diferente precio porque se les amplio el menú con más capacidad de alimentos. Nos dimos cuenta que pudieron usar su raciocinio. Luego se decide ir más allá, ahora les darían dos opciones en cada operación. En la primera cada vez que un mono comprara una uva se lanzaba una moneda al aire y si salía cara le darían una de regalo, mientras que si salía ceca se quedaría sólo con la uva comprada: La segunda opción consistía desde un inicio en darles dos uvas por la mismas moneda, también se lanzaba la moneda al aire y si salía cara les dejaban las dos compradas, mientras que si salía ceca le sacaban una y le dejaban la otra.
En cuanto los monos se dieron cuenta de que el investigador de las dos frutas se quedaba a veces con la segunda uva y que el investigador de una sola a veces añadía otra. Tuvo como resultado que los monos prefirieran claramente al científico de una sola fruta.
Analizando ambos casos se puede concluir que ambas opciones tienen el mismo resultado. 50% de probabilidades de conseguir una uva adicional gratis. Pasa que estos monos tenían lo que en psicología se llama como Aversión a la perdida, el sufrimiento de perder una uva era mayor que el placer de ganar otra. Un énfasis apresurado de todo este experimento es que los monos no son muy buenos evaluando riesgos. Lo asombroso es que cuando se hace un experimento de las mismas características entre humanos los resultados son iguales. Todo esto pasa por el Sesgo
Como influye el sesgo en nuestra consciencia
Se podría definir como una pequeña falla de pensamientos, normalmente involuntario que se adquiere en el procedimiento lógico que seguimos constantemente al pensar y decir cosas. De hecho todos tenemos sesgos y lo interesante sería eliminarlos. La aversión a la perdida es uno de ellos. Se fundamenta en la falta de objetividad sobre el balance perdida-ganancias. Esto trae consigo que para muchas personas el dolor por una pérdida es por lo menos el doble que la satisfacción por una ganancia de igual valor y cuando llegamos a perder nos volvemos más prudentes.