Buena parte de Los peligros del ecosistema marino radica en el hecho de que funciona como almacén de dióxido de carbono (CO2); de allí la urgencia de tomar medidas que favorezcan su conservación con miras a contrarrestar el cambio climático que tanto está afectando al medio ambiente y a las condiciones de vida de los seres y organismos que habitan el planeta tierra.
Recientes hallazgos indican que los manglares, pasos marinos y salinas entre otros cuerpos de agua, almacenan más de la mitad del total del carbono capturado por la naturaleza y eso ha permitido concluir que la reducción sistemática de las emisiones por deforestación puede ayudar a disminuir las emisiones globales de CO2 en al menos un 20%.
Esto contribuiría a evitar consecuencias más catastróficas del cambio climático e impediría que la temperatura media de la tierra suba más de 2°C lo cual se considera sumamente peligroso en la opinión de expertos.
¿Cómo afecta el cambio climático al ecosistema acuático?
En la opinión de los expertos en materia de contaminación ambiental, los océanos y sus ecosistemas juegan un papel determinante, que hasta ahora ha sido subestimado, en lo que respecta al aumento de las emisiones de CO2 por parte de los humanos. Incluso han llegado a insinuar que cualquier solución o medida correctiva debe partir de la inclusión de estos por su gran potencial para capturar el carbono.
Actualmente se adelantan programas en países con la mayor diversidad marina a nivel mundial, que se basan en el estudio de las posibilidades de zonas costeras y marítimas para el almacenaje de CO2. Todo ello con miras a contrarrestar o reducir los devastadores efectos del cambio climático sobre el medio ambiente y las condiciones de vida de la flora, fauna y personas que habitan el planeta.
Los ecosistemas se extienden a lo largo y ancho de la superficie terrestre, aérea y acuática del planeta tierra y es en estos espacios en los cuales se desarrollan y habitan las diversas formas de vida tales como plantas, animales y seres humanos. El agua en particular es un recurso de vital importancia para el medio ambiente si se tiene en cuenta que sin su presencia ninguna de estas formas de vida podría subsistir o sobrevivir.
Además del irresponsable accionar de los hombres, el cambio climático ha perjudicado significativamente el ecosistema acuático y por ejemplo en el caso de la fauna la consecuencia ha sido la extinción de varias especies, así como en el caso de la flora la contaminación de la atmosfera ha alterado el proceso natural de purificación del aire, causando daños a animales y humanos, por igual.