El uso excesivo del celular se convierte en un trastorno denominado “nomofobia”, el cual genera miedo irracional al no estar conectado.
En pocas palabras, con el avance de la tecnología y de los móviles, la sociedad se ha adaptado a estos equipos, bien sea para estar en grupos de trabajo, en plataformas como Whatsaapp, o simplemente para estar en contacto con familiares y amigos.
Algunas causas de la nomofobia
La inseguridad personal o baja autoestima es el primer factor que se asocia con la nomofobia, que consiste en la dependencia por el teléfono.
Por ejemplo, en adolescentes con problemas de timidez, se hace más fácil establecer una conversación virtual que en persona, para hacer amigos o buscar pareja.
La mayoría buscan ser aceptados en grupos dónde debatir temas que les sean de interés, mientras otros son adictos a las fotos en redes sociales.
Generalmente, tanto jóvenes como adultos, presentan ansiedad en el momento que el smartphone se queda sin batería o cuando no lo encuentran.
Otra señal es que las personas sienten la necesidad de atender constantemente el teléfono al recibir una llamada, de lo contrario se sienten mal.
Señales de ser adictos a los celulares
Permanecer toda la noche en el celular, es la primera señal de que se padece nomofobia, dejando de descansar para estar frente a la pantalla.
Otro signo es al acompañar a alguien sin prestarle atención, y en defecto presta interés al celular, sumándose así a la lista de adictos.
Generalmente, al no tener el teléfono, los síntomas son ataques de ansiedad, pensamientos obsesivos, taquicardias, dolores de cabeza y estómago.