El notable incremento de la temperatura del planeta es algo sumamente preocupante por todas las consecuencias que esto supone y que afectan tanto al ser humano como a los animales y plantas, y es que se trata de un verdadero desafío que demanda de acciones inmediatas para evitar que la situación se acentúe cada vez más y finalmente la supervivencia de todos los seres vivos se encuentre en riesgo inminente.

Ciertamente, el calentamiento global es un fenómeno de grandes alcances que encuentra su origen en una buena serie de factores, los cuales, para sorpresa de algunos, no tienen que ver en su totalidad con las malas acciones del ser humano y su falta de compromiso con ponerle fin a la contaminación y al uso inadecuado de los recursos renovables.

¿Por qué ocurre el calentamiento global?

• Acción antropogénica: así se denominan a ese conjunto de circunstancias que son el resultado de la actividad del hombre, es por eso que de manera específica pueden citarse aspectos tales como los gases emitidos por las fábricas industriales y autos, el afán interminable de crear productos como empaques y embalajes, la deforestación, las detonaciones nucleares y el consumo de combustibles fósiles entre otros.
• Acción natural: totalmente ajena a la acción de los seres humanos, esta forma de contaminación como su nombre lo sugiere se da de forma natural. Algunos ejemplos que la ilustran corresponden a los minerales que algunas veces se acumulan en el agua, los huracanes ya que transportan todo tipo de partículas al igual que los terremotos y las erupciones volcánicas.

¿Qué hacer al respecto?

Ante la imperiosa necesidad de establecer soluciones al calentamiento global, sobresalen acciones concretas que buscan que las personas empiecen a gestionar de manera más responsable al uso de la electricidad, preferir la bicicleta en lugar del coche y los empaques de vidrio en lugar de los de plástico.

Si bien existen muchas otras prácticas que logran hacer la diferencia, a rasgos generales todas se concentran en pequeñas acciones de la vida diaria que, aunque no lo parezcan representan contribuciones para alcanzar el bien común, y es que de no hacerse nada al respecto más adelante ya no existirá forma de revertir las cosas. La buena noticia, es que muchos gobiernos se han tomado muy en serio el trabajar para reducir los gases del efecto invernadero, así que los ciudadanos tienen el deber de incorporar todas estas disposiciones para disfrutar de los buenos resultados