Las bajas temperaturas benefician el mayor tráfico de virus respiratorios y, entre ellos, el catarro y la gripe son enfermedades que suelen contraer los niños y ancianos cuando bajan las temperaturas, y causan infecciones en los pulmones y en las vías respiratorias, debe ser de gran cuidado para los lactantes y bebés menores de un año ya que es una situación que puede desencadenar otra afección.
Aunque el frio en sí no es motivo para contraer gripe u alguna enfermedad respiratoria, si puede ser uno de los factores que parecen predisponer a que haya más contagios durante los meses más fríos del año. El frío no es el origen en sí misma, pero ayuda la propagación de los virus que causan estas enfermedades.
El frió y sus afecciones
Con el frío también se acrecientan también los infartos y derrames cerebrales. Las personas más sensibles a estos cambios suelen ser los ancianos y quienes tengan sus sistemas inmunes comprometidos. Esto se debe a que cuando el cuerpo se relaciona a bajas temperaturas se pierde más calor del que es capaz de reservar, y los vasos sanguíneos de la piel se contraen para conservar la temperatura corporal. La estructura de la sangre también cambia con el frío. De esta manera, el corazón tiene que trabajar con más potencia para bombear la sangre a través de los vasos contraídos, a la vez que los cambios en la concentración sanguínea agrandan el riesgo de coágulos y de los problemas que provocan.
Por otra parte, las afecciones respiratorias son las que juegan un papel de principal cuidado ya que a pesar de no ser el frio el principal causante, existen personas más vulnerables en esta época a contraer algún catarro o es más propenso a enfermarse, o simplemente se deduce que el frío no es lo que nos da la gripe, pero puede activar un virus que ya estaba presente.
El origen de las enfermedades respiratorias
Pueden surgir por una serie de causas, incluyendo la inhalación de agentes tóxicos, accidentes, por fumar, Las infecciones, elementos genéticos, y todo lo que afecta el desarrollo pulmonar, ya sea directa o indirectamente, pueden causar síntomas respiratorios. Los síntomas de afecciones respiratorias están relacionados estrechamente con los pulmones, el corazón, las emociones, ciertas condiciones o lesiones. Los problemas respiratorios pueden presentarse por una serie de condiciones que afectan a los pulmones directamente haciendo posible haya taquipnea y disnea, hipopnea, hiperpnea y apnea.
Lo mas importante no es atribuirle al frio el origen de estas enfermedades sino prevenir e incrementar los cuidados principalmente en las embarazadas, los ancianos, los bebés y los niños. Y ante todo estar preparados en caso de que aparezcan los primeros síntomas de una infección respiratoria y así tratarla a tiempo y evitar que el cuadro se agrave.